Pudines de chocolate con salsa de nata

Para celebrar el día del padre estuvimos en Parque Goya comiendo una, como siempre, rica barbacoa que prepara el Ruskino, y como siempre fue un día familiar estupendo. Primero había varias tapas ricas de la Pili que como buenos comedores no dejamos ni una, pero para postre llegó el GRAN POSTRE. Está sacado de un libro de recetas de chocolate que le regalaron a la cocinera y de verdad que le quedó bueno no, buenísimo.  Probarlo de verdad que es rico rico.

PUDIN DE CHOCOLATE BLANCO Y NEGRO

Ingredientes: ( para 6 personas)

• 125 g de mantequilla a temperatura ambiente
• 150g de azúcar moreno
• 3  huevos batidos
• 1 pizca de sal
• 25 g de cacao en polvo sin azúcar
• 125g de harina
• 25g de chocolate negro con poco azúcar picado
• 75 g de chocolate blanco picado

Salsa:

• 15ml de nata para cocinar                                    
• 75 g de azúcar moreno
•  cucharadas de mantequilla

Preparación:

Engrasar ligeramente 6 moldes de pudin, o de magdalenas, de 175ml para que salgan 6. En un bol batir la mantequilla con el azúcar  hasta obtener una crema esponjosa. Incorporar el huevo y batir. Añadir la harina, la sal y el cacao, si se tamiza mejor para que quede más fino y sin grumos. Añadir los dos tipos de chocolate picado y mezclarlos bien.

Repartir la pasta en los moldes. Engrasar un poco de papel de aluminio y taparlos bien apretando los bordes. Poner los moldes en una fuente y añadir agua hirviendo hasta la mitad de su altura. Cocer pos pudines al baño maría con el horno  a 180º durante 50 minutos, o hasta que al pincharlos con un cuchillo o palillo salgan limpios. Sacar los moldes de la fuente pero no desmoldar los pudines todavía.

Para preparar la salsa hay que llevar a ebullición la nata, con la mantequilla y el azúcar a fuego lento. Dejarlo hervir hasta que esté disuelto el azúcar.

Para evitar que se peguen los pudines pasar un cuchillo de punta redonda por los bordes y entonces les damos la vuelta sobre el plato. Ponemos la salsa por encima y a tomar el postre.

La otra parte de la receta son brochetas de  fresa y kiwi con chocolate caliente que al enfriarse con la fruta queda crujiente. ¡Para otro día!